TRES POEMAS DEL POETA COLOMBIANO SEBASTIÁN
ALBERTO CABRA BARRERA (INCLUYE DOS INÉDITOS)
Entrega oficial
María
es una fortuna
que por fin
pudieron hallarte
yo no pude
a pesar de saltar
la cerca de los sueños
Hemos visto crecer
tantos bosques
en tu ausencia
El acto estatal
celebró el regreso
y restó a la estadística
un uno
Me devolvieron
de tu cuerpo
una uña
al parecer
del dedo meñique del pie
encontrada como lápida
de una abeja reina
Ahora
cuido de ti:
te corto
cuando creces
te limo
para borrar la horquilla
te pinto
de colores vivos
te quito el esmalte
cuando te aburres del barniz
te cuido de los hongos
con clotrimazol
te beso
en el filo infinito de tus cabellos
Incluso
he pensado
en volver a casarnos
pero esta vez por la Iglesia
con vestido de bodas para uñas
aunque sé que todos
se opondrán
y me insistirán que te sepulte
que consiga
de esos ataúdes para uñas
(hoy tan populares)
y te devuelva
para que la tierra termine su trabajo
no puedo perderte
dos veces
me conformo con esta
pequeña parte de tu alma
porque
¿Cómo navegar este universo
sin la enorme vela que abraza el viento?
De Grieta oculta (2024)
POEMAS INÉDITOS
Buenas noches
Antes de dormir
me obligabas a orar:
padrenuestro,
avemaría,
ángel de la guarda.
Advertías:
No vaya a decir las oraciones rápido
porque así solo rezan los diablos.
Siempre
me había preguntado:
¿Por qué oran los demonios?
¿Para qué rezan los diablos?
Poco a poco
he comprendido:
razón tenías abuela
hasta ellos oran
así sea rápido
ruegan que cese la lluvia
y ardan las hogueras
en nuestras cabezas.
Sirenas rosadas
Los últimos empiristas analizaron
todos los mares y las tormentas
presentes en un vaso de agua
solo para establecer:
las míticas sirenas
eran en realidad manatíes.
Consecuencia:
en todo texto
escrito por el agua
será menester
incinerar la palabra sirenas
y reemplazarla por manatíes
Imaginarlas:
rosadas
circundantes
antropomorfas
bronceando al sol sus curvas
sobre las extensas rocas
que el mar corrompe.
Explicación:
Ulises escuchó
un lenguaje animal
dulce y redondo
una poesía
destejida de la oscuridad
por un iceberg que cae
del cielo.
No ofrecieron
toda la verdad de este mundo,
sino la metamorfosis
del ruido blanco en coherencia.
Así,
los manatíes (sirenas)
transformaron a Ulises
en uno de ellos:
besando su conciencia
en la intersección
de símbolos y signos,
de aquel lugar común
donde habita todo al morir.
Argos solo ladra y gruñe
a ese manatí que llora
en la orilla de Ítaca.
Sebastián Alberto Cabra Barrera (Bogotá, Colombia, 21 de junio de 1986). Abogado y magíster en derecho constitucional de la Universidad Nacional de Colombia y magíster en creación literaria de la Universidad Central de Bogotá. Sus áreas de trabajo en Derecho han alimentado profundamente su escritura, la cual se centra principalmente en los derechos humanos, el conflicto armado colombiano y la difusión de los derechos de grupos de personas vulnerables. Publicó en 2024 Grieta Oculta, producto del trabajo final de su maestría en creación literaria, poemario centrado en la violencia, ejercida en el marco de la guerra, y en sus efectos sobre las vidas de las víctimas.
¡Gracias Sebastián!, delicada y contundente manera de aludir a la ausencia y la tradición oral en clave geográfica.
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