En solidaridad con Israel, Ágora recuerda a dos de nuestros más queridos poetas y escritores, Margalit Matitiahu y Juan Zapato. Denunciamos el terrorismo que nos devuelve a la barbarie, así como el racismo y el antisemitismo repugnantes.
Margalit Matitiahu, en La Alhambra.
Margalit Matitiahu es, actualmente, la fuente de la poesía escrita en judeo-español, lengua entrañable, en cuyas raíces seguimos bebiendo todos los que hablamos alguna forma de español. Sobre su poesía hemos publicado con anterioridad en esta página, así también se encuentra en la Antología actual de poesía española La escritura plural.
Para conocer mejor a Margalit Matitiahu, recomendamos el programa de Televisión Española: Luz de Sefarad, dedicado a esta poeta imprescindible.
El poeta y narrador Juan Zapato ha colaborado con Ágora desde Israel, y mantiene el blog de actualidad literaria La torre de Babel.
http://latorredebabel.wordpress.com/2014/10/01/poemas-inditos-en-judeo-espaol-margalit-matitiahu
Margalit junto al poeta español Antonio Colinas (a su izquierda) |
Llevando amor y pasión entre mis piernas,
Muestros nombres se aunaron en el esfuenio
Que arelumbro la madrugada.
Del manante de la luz que cubrio mi alma.
De muevo se encontraron las aguas del rió
deshando atras el miedo,
Muestras manos tocaron sudor de caballos salvajes,
Las solombras de los años se iluminaron
Los nombres enflorecieron entre almohadas.
No preguntimos al tiempo
Si continuara a emprestar tiempo…
Los momentos corren sin encontrar dirección,
Preguntas enloquecidas suben y abashan
Entre me pecho y mis piernas,
En la camareta respira enverano ajeno,
La valija abre su boca en el espacio temporario…
En supito la llamada del telefono arazgo la noche,
Penetro en mí tu existencia invisible…
Se registra en mis ojos,
Mensajeros interiores corren en mis venas
Entregan un amor…
Los muvimientos se espanden como un hechizo,
La escuridad se asenta en las ventanas,
Se enrama bushcando salida…
Un aire frio me rodea, marea al selencio,
El ruido del día nace
Djunto mis penserios piedridos,
Se van escondiendo en el olvido…
Mirar a la madrugada
Como a un milagro.
Espander las manos
A los primeros rayos de la luz,
Y como un pasharo
Agradecer a los empesijos…
Descubrir penserios
Que esconden secretos de luz y luvia
guadrados en los caminos invesibles.
Entre las montanias de mi corazón,
En la cueba asolada, en mi disierto enterior,
Allí, con tu sonriza y tus ojos mavis
Vas arelumbrando mis pasos escuros…
Ya es hora de arecojerme y dar a la luz
Converserme…
Querido amigo, tus palabras solidarias transmiten aliento, calidez y la fuerza necesaria para continuar la senda que día a día estamos construyendo.
ResponderEliminarTus palabras se suman a tantas otras de gente como tú, amantes de la libertad, la paz, la convivencia, gente buena.
Porque de eso se trata, ser gente buena.
Nuestros sabios sintetizan el judaísmo en una frase: "ama a tu prójimo como a ti mismo".